El 20 de noviembre es un día importante: se celebra el Día Universal del Niño y se conmemoran los aniversarios de la adopción de la Declaración Universal de los Derechos del Niño (1959) y la aprobación de la Convención de los Derechos del Niño (1989).
Esta Convención, establece una serie de derechos para los niños y las niñas, incluidos los relativos a la vida, la salud y la educación, el derecho a jugar, a la vida familiar, a la protección frente a la violencia y la discriminación, y a que se escuchen sus opiniones, tal y como explica ONU.
Asimismo, este organismo nos insta a llevar a cabo medidas inspiradoras en este día tan importante para defender, promover y celebrar los derechos del niño a través de acciones que construyan un mundo mejor para ellos.
En un contexto como el actual, donde el mundo entero se ha visto azotado por la pandemia de la Covid-19, estamos siendo conscientes de la importancia de la vacunación. Hace unos días recibimos la noticia de que finalmente se ha encontrado una vacuna contra esta enfermedad, un hecho histórico que poco a poco nos ayudará a recuperar esa ansiada “nueva normalidad”.
Esta noticia nos sirve como punto de partida para reflexionar sobre la importancia de las vacunas. Así, no debemos olvidar que hay enfermedades que ya tienen prevención gracias a las mismas y que no llegan a todas las esferas sociales: La probabilidad de que un niño nacido hoy esté completamente vacunado con todas las vacunas recomendadas a nivel mundial para cuando llegue a la edad de 5 años es inferior al 20%, advierte ONU.
“El progreso en la cobertura de inmunización de por sí se estancó antes del impacto de COVID-19, al 85% para las vacunas de la difteria y el sarampión. En 2019, casi 14 millones de niños no tuvieron acceso a vacunas que salvan vidas, la mayoría en África. Dos tercios de ellos se concentran en 10 países de ingresos medios y bajos: Angola, Brasil, República Democrática del Congo, Etiopía, India, Indonesia, México, Nigeria, Pakistán y Filipinas. Los niños en los países de ingresos medios representan una parte cada vez mayor de la carga”.
Además, asegura que el impacto de la pandemia por la COVID-19 en la mortalidad infantil, puede revertir décadas de progresos en este sentido. Aunque desde 1990 el número de niños fallecidos se redujo a la mitad hasta los 5,2 millones en 2019, “cuando se impide a los niños el acceso a los servicios de salud por sobrecarga del sistema, y cuando las mujeres tienen miedo de dar a luz en el hospital por temor a la infección, ellas también pueden convertirse en víctimas del COVID-19”, explica la directora ejecutiva de UNICEF.
Por eso, desde Proyectos Sociales de Iberdrola, una de las empresas con las que trabaja Fundación Hazloposible, han puesto en marcha una campaña de donación para vacunar a niños y niñas que viven en entornos frágiles o en contextos humanitarios, como, por ejemplo, los países afectados por conflictos.
Así, todas las donaciones de los empleados de la entidad, servirán para vacunar a niños y niñas de todo el mundo contra enfermedades infantiles mortales como el sarampión, la diarrea y la neumonía.
Este es solo un ejemplo de cómo las acciones de Voluntariado Corporativo pueden aportar un gran impacto positivo en diferentes causas sociales. Desde Fundación Hazloposible ofrecemos plataformas para llevar a cabo este tipo de acciones y ayudar en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
¿Quieres que tu empresa ofrezca oportunidades de voluntariado corporativo virtual o presencial a tus empleados? Escríbenos a voluntariado.digital@hazloposible.org y te ayudamos.
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